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PARAISO RESCATADO
Por Elí Sánchez
Con el avance del tiempo y la urbanización, nuestro equilibrio con el medio ambiente se ha vuelto un destello en la imaginación de algunos raros soñadores utópicos.
Pareciera como si ya no existiesen aquellos lugares de Coyoacán donde muchos, dicen, aprendieron a nadar o lavaban ropa junto al río. En los pozos donde había peces de colores sólo existen pesadas losas de cemento que cubren el vacío dejado por el agua y la vida que fluía ahí.
Elí Sánchez
Omar Escobedo
Aún así, protegiéndose, resguardado en el corazón mismo de los pedregales, el Parque Ecológico Huayamilpas abre a la comunidad sus puertas cada día con la firme consigna de recuperar un poco lo perdido.
Inaugurado en 1973, Huayamilpas, es un espacio donde la gente de pedregales tiene la posibilidad de rescatar con sus propias manos una cultura ecológica capaz de impactar su propia comunidad.
El parque ofrece visitas guiadas donde las personas, sobre todo niños en edad escolar, puedan conocer todo aquello que lo hace especial: Su cactáreo de especies endémicas, donde se preservan cactáceas representativos de la flora nacional. Un proyecto de estanques artificiales para el criadero de peces. Un lago que cada año recibe aves migratorias y donde hoy residen varias decenas de patos que camino al sur encontraron su hogar.
Aquí hay un conjunto de esculturas que reflejan la identidad del lugar y la relación que tiene su gente con el medio ambiente: se pueden apreciar al Cantero, el Órgano, la Media luna con niño, y la Serpiente de rocas.
Huayas alberga a  la Casa de Cultura Raúl Anguiano, abierta desde 1994, que también ofrece una amplia variedad de cursos y talleres, dentro de los cuales existen algunos dedicados a la ecología.
Existen los de aromatizantes con aserrín, de elaboración de jabones, reciclado de papel, tarjetas y separadores de libros, huertos familiares y un invernadero donde se cultiva a partir de la hidroponía.
Allí la gente aprende a cultivar hortalizas, hierbas de olor, y otros productos comestibles, capaces de crecer en espacios  reducidos y sin tierra, lo que benefician a la economía familiar, pues su estructura de riego y vivero puede construirse con base en materiales reciclados.
El Parque Ecológico Huayamilpas es un espacio en espera de ser explotado por la gente que vive en Coyoacán para pasar de ser un simple parque al raro sueño de  la gente que desea una simbiosis entre comunidad y ambiente, convirtiéndose a punta de ecología, en un lugar mejor.